SIN PRONUNCIAR PALABRA

SIN PRONUNCIAR PALABRA


Que se pierda en vendaval de cuerpos
aquellos susurros tenues,

que abres a mi boca en desespero
razón contenida en tus instintos

que me pierda entre tus brazos
hábiles de amarme

roce al punto débil de tus manos
crispando mis pechos

agitando mi sangre golpe ante
entre mis venas

floreciendo mis senos entre tus
dedos, al suave tacto que evocan

amante mío, flamea en causa este
cuerpo febril que te llama, a gritos

justa ofrenda que a ti me vierto
entre sabanas;

-“de seda negro, de seda vino”-

lirios, rosas y jazmines que perfumen
nuestra entrega,

bañada ante ti con fino aceite aroma
de incienso, en lecho prohibido

que arda el cielo, que arda el infierno
si de tu vida me alejo,

porque por tu amor, yo muero
porque por tu cuerpo, yo deliro

para poseerte sin medida como fiera
destrozando tu carne, a besos

para amarte entre luna llena
para amarte entre noche cielo

que se vierta el hechizo sueño
pedido, ansiado por tu boca

en esa magia sublime yaciente virilidad
entre mis piernas,

en ese fuego desbordante de tu cuerpo
sobre mi cuerpo,

que cueste un mar entre la distancia
mas anidaremos vientre contra vientre

dejaremos que nuestros deseos
naveguen por mares secretos

certeza en mi instinto misterio
de mujer enamorada, de mujer amada

cuando solo mi cuerpo te nombra
entre las cobijas del silencio

en el sigilo de una noche fría
en el sigilo de una noche ansiada

Sin pronunciar palabra…

Grechka lee Maldonado
Diciembre 12,2009

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